SI TE REHÚSAS A ENFRENTAR A LOS GIGANTES TENDRÁS QUE DAR VUELTAS Y VUELTAS POR EL ÁRIDO DESIERTO DE UNA VIDA SIN GOZO

Santiago 1:2-7 Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas, sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia. Mas tenga la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos y cabales, sin que os falte cosa alguna. Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada. Pero pida con fe, no dudando nada; porque el que duda es semejante a la onda del mar, que es arrastrada por el viento y echada de una parte a otra. No piense, pues, quien tal haga, que recibirá cosa alguna del Señor.

Si una y otra vez te rehúsas a enfrentar a los gigantes que Dios permite que se crucen en tu camino, si una y otra vez ofendes a Dios con tu incredulidad y optas por endurecerte en vez de confiar de que todo cooperara para bien y que cada desafió no es sino una oportunidad para que Dios sea glorificado, en tal caso sólo puedes esperar vagar por el desierto de la mediocridad, solo verás la arena del árido desierto de una vida sin gozo, no podrás experimentar la vida de Canaán, no podrás contemplar como al igual que en Jericó las murallas de cada prueba se desploman ante la certeza y la convicción de que Dios está al control de cada circunstancia.

Esto es precisamente lo que le sucedió al pueblo de Israel, estaban a tan solo 11 días de marcha de Canaán y cuando fueron a reconocer la tierra solo vieron a los gigantes que habitaban la tierra, sólo vieron las imposibilidades, se olvidaron que Dios los había conducido por todo el camino, se olvidaron que Dios desbastó y puso de rodillas al imperio más poderoso de la tierra para que salieran de Egipto, se olvidaron que Dios había abierto el mar Rojo, se olvidaron del maná y de todo lo que Dios había hecho en medio de ellos; sólo tenían que mantenerse firmes ante ese desafío y creer que Dios les daría la victoria ante esos gigantes. Si tan sólo hubieran convocado a una reunión de oración y de clamor se habrían fortalecido, se habrían llenado de la certeza y la convicción de que Dios los había traído hasta ahí con un propósito, pero no es eso lo que hicieron, sino que una vez más se negaron a confiar en Dios, y la Biblia dice que ninguno de esa generación excepto Josué y Caleb entraron a la tierra prometida, el resto tuvo que dar vueltas por el desierto durante 40 años, Dios nunca quitó el maná ni permitió que su calzado y su vestido se envejecieran .

Es sumamente importante considerar para entender este tema que CANAÁN NO ES TIPO DEL CIELO SINO DE UNA VIDA QUE SE VIVE EN EL PODER DEL ESPÍRITU SANTO, TENIENDO SIEMPRE LA REVELACIÓN FRESCA DE CUÁL ES LA ESPERANZA A LA QUE DIOS NOS HA LLAMADO, Y CUÁL LA SUPER EMINENTE GRANDEZA DEL PODER QUE LEVANTO A CRISTO DE LOS MUERTOS Y QUE MORA EN CADA REDIMIDO. CANAÁN NO ES TIPO DEL CIELO PORQUE SENCILLAMENTE EN CANAÁN HAY BATALLAS QUE LIBRAR, HAY TENTACIONES, HAY ENEMIGOS Y NADA DE ESO HABRÁ EN EL CIELO.

La Biblia dice que a pesar de que Dios estuvo disgustado con aquella generación aun así no les quitó el maná, Y EL MANÁ ES TIPO DE LA VIDA DE CRISTO:
Neh 9:19 tú, con todo, por tus muchas misericordias no los abandonaste en el desierto. La columna de nube no se apartó de ellos de día, para guiarlos por el camino, ni de noche la columna de fuego, para alumbrarles el camino por el cual habían de ir.
Neh 9:20 Y enviaste tu buen Espíritu para enseñarles, y no retiraste tu maná de su boca, y agua les diste para su sed.

Y ESTO NOS HABLA A LAS CLARAS QUE LA INCREDULIDAD PUEDE ACARREARNOS UNA VIDA DE DAR VUELTAS Y VUELTAS POR ÁRIDO DESIERTO DE LA MEDIOCRIDAD, TAL COMO LE PASO A ISRAEL, Y ESTO EN TÉRMINOS PRÁCTICOS SIGNIFICA QUE LA INCREDULIDAD PUEDE ROMPER NUESTRA COMUNIÓN CON EL SEÑOR Y TRAERNOS UNA VIDA MISERABLE EN NUESTRO PEREGRINAR COMO SALVOS.

Según lo que leemos en el pasaje de Santiago cap. 1, los momentos de prueba cuanto somos puestos en la situación de enfrentar a los gigantes, son momentos para pedir a Dios espíritu de revelación y de sabiduría; la Biblia dice que con toda certeza se nos dará y sin reproche alguno, CUANDO LOS GIGANTES APARECEN EN NUESTRO PEREGRINAR LO PRIMERO QUE DEBEMOS HACER ES SUMERGIRNOS EN LA ORACIÓN LO QUE NOS PERMITIRÁ VER TODA CIRCUNSTANCIA DESDE LA PERSPECTIVA CORRECTA, ESO REDUNDARA EN CRECIMIENTO.

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