! AY DE AQUELLOS QUE DESCIENDEN A EGIPTO!!

Isa 31:1 ¡Ay de los que descienden a Egipto por ayuda, y confían en caballos; y su esperanza ponen en carros, porque son muchos, y en jinetes, porque son valientes; y no miran al Santo de Israel, ni buscan a Jehová!

Si bien es cierto que en el contexto en que se da esta advertencia al pueblo de Israel se trataba de algo literal que en verdad estaba sucediendo, es decir, la actitud de parte de los que gobernaban Israel de confiar en los mismos recursos que confiaban quienes pertenecían a aquel sistema pagano y sin Dios, no es menos cierto que Egipto junto con sus carros, y sus fuerzas de jinetes altamente adiestrados para la batalla representaba al mundo junto con todo lo que lo mueve y lo sostiene; sus ideales, sus principios, sus motivaciones.

Hoy por hoy, hay una camada de “ministros” que no creen en la suficiencia de las escrituras de la misma manera que quienes dirigían a Israel no confiaban en Jehová para hacer frente a sus enemigos, pues así como aquellos reyes apostas descendían a Egipto en busca de ayuda, hoy muchos de los que supuestamente están para apacentar el rebaño del Señor convocan a maestros de la metafísica, a motivadores, para que le “enseñen” al pueblo de Dios cómo ser exitosos, cómo decretar, cómo visualizar.

Presidentes de denominaciones que realizan retiros para pastores y convocan a psicólogos para que les “enseñen a los pastores” a tratar con los problemas espirituales de los redimidos; ciegos guías de ciegos, hombres no regenerados, que como ya dijimos, no creen en la suficiencia de las escrituras porque no conocen a su autor, y es por eso que apelan a quienes se manejan con los rudimentos de este mundo y no con la sabiduría que solo ha de ser encontrada en la Palabra eterna de Dios, y todo esto bajo encabezados muy atrayentes tales como: “alcanza tus metas”, “conquistando las naciones”, y tantos otros más que en esencia nada tiene que ver con la palabra de Dios sino con Egipto, con el sistema de este mundo y con quien es su príncipe.

¡Ay de los que descienden a Egipto en busca de ayuda y hay de aquellos que debilitan al pueblo de Dios convocando a individuos que les hacen tropezar con falsas doctrinas, ay de ellos!!!!.

Dios está sacando a cada una de sus ovejas de este sistema apostata que se está construyendo en estos tiempos finales, sistema que no es otra cosa que la Antigua Babel, y cuya etapa final será la religión mundial única que respaldara al anticristo.

Pero lo más glorioso es que no sólo los está sacando de dicho sistema apostata, sino que también los está instruyendo y los está forjando como gladiadores que saben blandir la espada de la verdad, instruyéndolos en verdades fundamentales de la fe cristiana, verdades que durante siglos fueron resistidas por quienes pugnan por un falso evangelio y por un falso cristo humanista, creado a imagen y semejanza de quienes han reemplazado la soberanía de Dios por la soberanía del hombre.

¡¡¡Solo a Dios sea La Gloria!!!

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