Desde el momento que un razonamiento humano es puesto por encima de lo
que la misma Biblia enseña, es porque se está adhiriendo a una forma de
existencialismo.
Las distintas escuelas existencialistas se adhieren al principio que la
única verdad es la que es válida para cada individuo en particular, y los
existencialistas "cristianos" de igual manera aceptan lo que para
ellos es válido y aceptable; por ejemplo, el existencialista
"cristiano" se niega a aceptar la elección incondicional, porque
alega que la considera una doctrina injusta e inaceptable; otro ejemplo de
existencialismo "cristiano" esta dado por aquellos que no pueden
aceptar bajo ningún punto de vista que a pesar de que el hombre está
absolutamente incapacitado para dar el primer paso hacia la salvación, aun así
sea responsable de no querer venir a la luz.
Pero la cosa no termina ahí, porque también están apareciendo
razonamientos existencialistas en lo escatológico; por ejemplo, respecto al Arrebatamiento,
ciertos "cristianos" razonan así: Si la iglesia de los primeros
siglos padeció persecución por qué nosotros hemos de ser librados de la Gran
Tribulación. Nuevamente el común denominador no es la verdad objetiva, sino
impresiones subjetivas, que en este caso tiene su raíz en la justicia propia
que se aferra a la impía noción de que la salvación debe ser completada a
través del martirio. Dejando de lado consideraciones tan elementales tales
como, que mientras que la fuente del sufrimiento de nuestros hermanos fue el
odio de un mundo bajo el maligno, por otro lado, el sufrimiento en la Tribulación
será la misma ira de Dios, con el agravante que también se deja de lado otra
verdad fundamental, como la que establece que Dios no ha puesto a su Iglesia
para ira, porque la ira ya fue descargada sobre nuestro Sustituto en la cruz.
Esta forma de interpretar las Escrituras explica el porqué de tanta
confusión doctrinal existente. Es decir, estamos en un tiempo donde cada uno
cree y acepta lo que para el resulta valido y aceptable.
Nota: Este material se puede distribuir y publicar con toda
libertad siempre y cuando se respete el autor.
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