Jud 1:11 ¡Ay de
ellos! porque han seguido el camino de Caín, y se lanzaron por lucro en el
error de Balaam, y perecieron en la contradicción de Coré.
Gen 4:1 Conoció Adán a su mujer Eva, la cual concibió y
dio a luz a Caín, y dijo: Por voluntad de Jehová he adquirido varón. Gen
4:2 Después dio a luz a su hermano Abel.
Y Abel fue pastor de ovejas, y Caín fue labrador de la tierra. Gen 4:3 Y aconteció andando el tiempo, que Caín trajo
del fruto de la tierra una ofrenda a Jehová. Gen 4:4 Y Abel trajo también de los primogénitos de
sus ovejas, de lo más gordo de ellas. Y miró Jehová con agrado a Abel y a su
ofrenda; Gen 4:5 pero no miró con agrado
a Caín y a la ofrenda suya. Y se ensañó Caín en gran manera, y decayó su
semblante. Gen 4:6 Entonces Jehová dijo
a Caín: ¿Por qué te has ensañado, y por qué ha decaído tu semblante? Gen
4:7 Si bien hicieres, ¿no serás enaltecido? y si no hicieres bien, el pecado está a la
puerta; con todo esto, a ti será su deseo, y tú te enseñorearás de él. Gen
4:8 Y dijo Caín a su hermano Abel: Salgamos
al campo. Y aconteció que estando ellos en el campo, Caín se levantó contra su
hermano Abel, y lo mató. Gen 4:9 Y
Jehová dijo a Caín: ¿Dónde está Abel tu hermano? Y él respondió: No sé. ¿Soy yo acaso guarda
de mi hermano? Gen 4:10 Y él le dijo:
¿Qué has hecho? La voz de la sangre de
tu hermano clama a mí desde la tierra. Gen 4:11
Ahora, pues, maldito seas tú de la tierra, que abrió su boca para
recibir de tu mano la sangre de tu hermano. Gen 4:12 Cuando labres la tierra, no te volverá a dar su fuerza; errante y extranjero serás en la tierra. Gen
4:13 Y dijo Caín a Jehová: Grande es mi
castigo para ser soportado. Gen 4:14 He
aquí me echas hoy de la tierra, y de tu presencia me esconderé, y seré errante
y extranjero en la tierra; y sucederá que cualquiera que me hallare, me matará.
Gen 4:15 Y le respondió Jehová:
Ciertamente cualquiera que matare a Caín, siete veces será castigado. Entonces Jehová puso señal en Caín, para que
no lo matase cualquiera que le hallara. Gen 4:16 Salió, pues, Caín de delante de Jehová, y
habitó en tierra de Nod, al oriente de Edén. Gen 4:17 Y conoció Caín a su mujer, la cual concibió y
dio a luz a Enoc; y edificó una ciudad, y llamó el nombre de la ciudad del
nombre de su hijo, Enoc.
En
la epístola de Judas se nos advierte que en la apostasía que tendría lugar en
los tiempos del fin, es decir, en los tiempos que nos toca vivir; algunas de
las características que tendrían los apostatas, estarían representadas por la
carrera iniciada por este personaje del Antiguo Testamento llamado Caín.
Pero
antes de adentrarnos en el análisis de la carrera de este personaje, conviene
recordar algunas cosas, como por ejemplo, que cuando Adán y Eva pecaron, la Biblia
dice que ambos intentaron cubrir su desnudes con vestidos de hojas:
Gen 3:7 Entonces fueron abiertos los ojos de ambos, y
conocieron que estaban desnudos; entonces cosieron hojas de higuera, y se
hicieron delantales. Gen 3:8 Y oyeron la voz de Jehová Dios que se paseaba en
el huerto, al aire del día; y el hombre y su mujer se escondieron de la
presencia de Jehová Dios entre los árboles del huerto. Gen 3:9 Mas Jehová Dios
llamó al hombre, y le dijo: ¿Dónde estás tú? Gen 3:10 Y él respondió: Oí tu voz en el huerto, y
tuve miedo, porque estaba desnudo; y me escondí.
Es
de suma importancia destacar que el intento del hombre de cubrir la desnudez
producto de la desobediencia fue vano, porque precisamente esa acción de parte
del hombre y la mujer de hacerse delantales, simboliza el esfuerzo humano por
justificarse delante de Dios mediante las buenas obras.
La
palabra nos relata que a pesar de tener esos delantales se sintieron desnudos
delante de la presencia de Dios, y de igual manera todo aquel que base su salvación
en sus buenas obras, un día despertará a la trágica y horrenda realidad que
esas buenas obras al igual que los delantales de Adán y Eva, no pueden ser un
vestido adecuado para estar en la presencia de un Dios infinitamente Santo.
Claro que ya será demasiado tarde como para escapar de la condenación eterna.
Ahora
bien la Biblia nos relata que Dios mismo les proveyó el único vestido adecuado
para cubrir la desnudes humana producto de la caída.
Gen 3:21 Y Jehová Dios hizo al hombre y a su mujer
túnicas de pieles, y los vistió.
El
animal sacrificado para obtener esas pieles representa a Cristo y su sacrificio
expiatorio en la Cruz del Calvario, y el acto de vestirlos representa la
justicia que le es imputada a todo aquel que recibe a Cristo por la fe. Es
decir, aquí se presenta en figura la justificación.
¿Y qué es
la justificación?
Respuesta: La justificación es el acto legal que
tiene lugar en el tribunal celestial, y mediante este acto, Dios declara
que todo lo que la ley demanda al pecador que cree ha sido cumplido por los
méritos del sacrificio de Cristo. Y por el acto de creer (en Cristo) ésta
justicia que Cristo cumplió en la cruz nos es imputada, es decir, es puesta a
nuestra cuenta.
Al
sacrificar ese animal a efectos de obtener el único vestido adecuado, Dios le
estaba revelando al hombre aquella verdad que se menciona a lo largo de toda la
Biblia:
Heb 9:22 Y casi
todo es purificado, según la ley, con sangre; y sin derramamiento de sangre no
se hace remisión.
Pero
retomando el hilo de este estudio, sabemos que Adán Eva transmitieron esta importante
verdad a sus hijos Caín y Abel.
A
la luz del Salmo 65:4 podemos afirmar que Adán y su mujer fueron los primeros
seres caídos en formar parte de la nómina de escogidos, es decir, ellos fueron
atraídos eficazmente para creer la promesa de Dios que vendría un redentor, y
por esa fe se convirtió en un vencedor, y consecuente con esa fe le transmitió
esa gloriosa promesa a sus hijos Caín y Abel.
Caín
pisoteó esta verdad, se negó a creer y aceptar que su única esperanza estaba en
el sacrificio que Dios iba a proveer, y este repudio a la promesa de Dios, se
ve claramente en el tipo de ofrenda que trajo, en vez de acercarse a Dios
mediante un sacrificio, trajo del fruto de la tierra, es decir, trajo del fruto
de su esfuerzo y de sus logros, y Dios lo rechazo; como va a rechazar a todos
estos falsos maestros del evangelio de prosperidad y riquezas, que en el juicio
final quieran poner delante de el todas sus conquistas y sus logros materiales,
y tendrán que escuchar: apartaos de mi hacedores de maldad, porque nunca os
conocí.
Gen 4:3 Y
aconteció andando el tiempo, que Caín trajo del fruto de la tierra una ofrenda
a Jehová. Gen 4:4 Y Abel trajo también
de los primogénitos de sus ovejas, de lo
más gordo de ellas. Y miró Jehová con agrado a Abel y a su ofrenda; Gen
4:5 pero no miró con agrado a Caín y a
la ofrenda suya. Y se ensañó Caín en gran manera, y decayó su semblante.
La
Biblia nos enseña que Abel creyó en esta verdad, y actúo en consecuencia, acercándose
a Dios mediante un sacrificio.
Para los tiempos que corren, es de capital importancia
comprender por qué Dios rechazó la ofrenda de Caín. Porque también Dios
rechazará a todos aquellos que se atreven al igual que Caín, a creer que se
pueden acercar a Dios por otro camino diferente al que nos proveyó el
sacrificio de Cristo.
Todo
aquel que enseñe una justificación que tiene como fundamento las obras humanas,
esta siguiendo el camino de Caín.
Todo
aquel que se sume al movimiento ecuménico, esta siguiendo el camino de Caín.
Todo
aquel que se encamine a formar parte de la religión mundial única que se está
formando, está siguiendo el camino de Caín.
Todos
esos pastores que en mi país Argentina forman parte del parlamento argentino de
religiones, están siguiendo el camino de Caín.
Cuando
un pastor participa junto a un sacerdote romanista, esta siguiendo el camino de
Caín.
PERO
HAY OTRO ASPECTO IMPORTANTE DEL CAMINO DE CAÍN, QUE NO PODEMOS DEJAR DE
CONSIDERAR, Y ES EL SIGUIENTE:
CAÍN
EL HOMICIDA, FUE EL PRIMER DOMINIONISTA O REINO AHORA QUE EXISTIÓ SOBRE LA
TIERRA, PORQUE DESPUÉS DE ALEJARSE DE LA PRESENCIA DE DIOS CENTRO SUS ENERGÍAS
Y AFECTOS EN HACER DE ESTE MUNDO UN PARAÍSO.
MIENTRAS
QUE TODOS AQUELLOS, QUE SE ACERCAN A DIOS POR LA FE, SON EXTRANJEROS Y
PEREGRINOS, PORQUE ANHELAN UNA PATRIA MEJOR CUYO ARQUITECTO Y FUNDADOR ES DIOS.
TODOS
AQUELLOS QUE PERTENECEN AL MOVIMIENTO PROFÉTICO APOSTÓLICO ESTÁN SIGUIENDO EL CAMINO
DE CAÍN.
TODOS
AQUELLOS QUE ALIENTAN A LOS CRISTIANOS A
INVOLUCRARSE EN LA POLÍTICA ESTÁN SIGUIENDO EL CAMINO DE CAÏN.
TODOS
AQUELLOS QUE DICEN QUE VAN A CONQUISTAR LA TIERRA PARA GOBERNAR CRISTIANAMENTE
EL MUNDO ESTÁN SIGUIENDO EL CAMINO DE CAÍN.
Nota: Este material se puede distribuir y
publicar con toda libertad siempre y cuando se respete el autor.
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