Hechos 10: 34-35; 34 Entonces Pedro, abriendo la boca, dijo: En verdad comprendo que Dios no hace acepción de personas, 35 sino que en toda nación se agrada del que le teme y hace justicia. A continuación analizaremos uno de los textos predilectos de quienes niegan doctrinas fundamentales de la fe cristiana como la total depravación, la elección incondicional, y la gracia irresistible de la que son objeto los elegidos. Es decir, la torcida interpretación arminiana de este texto, se suele utilizar como fundamento de que no existe tal cosa como el que Dios según el puro afecto de su voluntad haya escogido personas para en su momento ser atraídas eficazmente a la salvación, dejando al resto en la dureza de sus corazones, porque si esto fuera así, dicen ellos, Dios estaría haciendo acepción de personas, lo cual según ellos estaría en contradicción con este texto de Hechos 10: 34-35. En primer lugar hay que dejar en claro que cuando Pedro dice que Dios no hace acepción ...