Más de un hombre de Dios, se ha referido a La Regeneración como a una doctrina perdida, porque, aunque mucho se habla y se enseña de la regeneración, lo que se enseña no tiene absolutamente nada que ver con lo que se nos revela en las Escrituras acerca de esta obra divina. A lo que nos referimos es que alguien que ha cursado en un instituto bíblico en donde se ocultan Las Doctrinas de la Gracia, aunque a lo largo de tres o cuatro años, centenares de veces haya escuchado mencionar la palabra regeneración, egresa sin entender lo que La Biblia verdaderamente enseña, y esto debido a que quienes enseñan en esos institutos, el semipelagianismo que los embarga les ha llevado a sepultar la verdad reemplazándola por una falsa regeneración, en donde el hombre es el que da el paso inicial. Una falsa regeneración que eventualmente podría tener efectos transitorios, pudiendo llegarse a la condición que alguien que fue regenerado termine siendo un apostata. La regeneración, ha sido y sigue ...